El
verano en Correos, ha sido siempre la época del año menos propicia para la
movilización. Sin embargo, es patente que el descontento de toda la plantilla,
(personal fijo, discontinuo y eventual) va en aumento. Durante el verano de
2015, las movilizaciones iniciadas en el otoño anterior en muchos centros de
trabajo tras los abusivos recortes de plantilla (dimensionamientos) y en contratación,
han continuado sin interrupción incluso en el mes de Agosto. ¿Qué produce
tanto malestar en la plantilla de Correos?
La pérdida de empleo
En
los últimos años, la plantilla en correos se ha reducido drásticamente, pasando
de 65.924 empleos en el año 2008, a los 51.064 de media en 2014. Esto ha
supuesto una perdido de 14. 649 empleos, lo que significa un 22% de la
plantilla en tan solo 6 años.
Esta
sangría de puestos de trabajo (supresión de puestos de trabajo y cobertura de
ausencias tendente a cero) no es consecuencia directa, como dice la empresa, de
la perdida de volumen de negocio, ya que reconociendo la bajada de productos
tradicionales como la carta, también es cierto el aumento de otros productos
con mayor valor añadido como la correspondencia registrada y la paquetería. La
disminución de puestos de trabajo es una consecuencia de ser una empresa más
del grupo SEPI. Correos está siendo gestionada con criterios puramente mercantilistas, aplicándole sin piedad la
fórmula mágica de ahorro en gastos de personal, sin tener en cuenta la calidad
del servicio, el cumplimiento del SPU, la salud y condiciones laborales de sus
trabajadoras y trabajadores.
La
falta de plantilla suficiente hace que los recorridos asignados diariamente
para el reparto de la correspondencia aumentan de forma que no se pueden
terminar, quedando diariamente correspondencia sin repartir. En las oficinas de
atención al cliente, las colas de espera son interminables. La consecuencia de
todo esto es una mala calidad del Servicio
Postal al conjunto de la ciudadanía y el incumplimiento por parte de Correos
de la ley postal en su mandato de
reparto universal de al menos 5 días a la semana.
Su repercusión en la
salud y en las condiciones laborales
Todo
eso tiene su efecto en la salud de los y las trabajadoras de Correos. La falta
de personal provoca estrés, lesiones dorso-lumbares y enfermedades
psicosociales, además de un aumento de los accidentes laborales. La estadística
proporcionada por la propia empresa en nuestra zona en octubre de 2014,
demostró que los índices de absentismo aumentaron sobre los de 2013 tanto en
enfermedades comunes como en accidentes de trabajo.
Pero por si fuera poco, Correos año
tras año sigue obteniendo beneficios (48m € en 2013 y 193m € en 2014).
Y
además, según la última memoria publicada por la Dirección, las partidas para
sueldos del consejo de administración y la Dirección de Correos han subido
desde 2011, un 18%.
Hay
que exigir a Correos que cubra los puestos de trabajo de forma que el servicio
salga con la calidad deseada, no se conculquen derechos y se respete la salud
laboral del conjunto de la plantilla. Habiendo dinero No permitamos que
nuestras compañeras y compañeros eventuales (el colectivo peor tratado) se queden
en sus casas sin contrato.
La negociación colectiva.
Ha
pasado más de año y medio desde la expiración el 31 de diciembre de 2013
de los acuerdos (personal funcionario)
y III convenio colectivo (personal
laboral) 2009-2013.
Una
vez que, tanto a Correos como a algunos sindicatos, les ha quedado claro que el
III convenio (artículo 6) tiene prorrogada su vigencia indefinidamente mientras
dure la negociación, no debemos permitir que los intereses electoralistas
(elecciones sindicales en Diciembre) les
lleven de nuevo a la firma de pobres acuerdos dejando pendiente de desarrollo
temas importantes que no llegan a desarrollarse. No sería la primera vez.
El
martes 15 de septiembre, se reúne de nuevo la mesa de negociación en Madrid.
Sería bueno que los sindicatos mayoritarios firmantes (CCOO, UGT, CSIF y SL)
cambiaran de actitud y comenzaran a informar con claridad a la plantilla sobre
todo el proceso. Hasta la fecha no lo han hecho. También sería bueno que
propiciaran la participación de toda la plantilla de Correos en las decisiones
a tomar, desde cualquier movilización, hasta la firma final.
A
juicio de Esk, los elementos más importantes, que generan mayor incertidumbre
en la plantilla y que por lo tanto
contribuyen a aumentar el gran nivel de malestar existente serían los
siguientes:
A) Incumplimiento de los
acuerdos y III convenio (2009-2013)
·
Concurso
de traslados: Tanto
los acuerdos como el III convenio (2009-2013), dicen que se harán convocatorias
anuales sin que exista vinculación a la fecha de expiración (2013). Por tanto
en 2014 y en 2015 Correos ha incumplido su compromiso dejando a muchas personas
en situación delicada: No solo al personal fijo-discontinúo, al que se le ha
cerrado las puertas a la posibilidad prometida de asegurar su fijeza, sino también
a la gente que está esperando un traslado a otra localidad o aspira a cambiar
de puesto de trabajo en su misma localidad. Sin olvidar que, quienes por
cuestiones de salud aspiren a cambiar a otro puesto de trabajo asumible,
actualmente solo tiene la posibilidad de hacerlo a través de un concurso de traslados.
Todas estas personas han visto cercenado un derecho legítimo por el
incumplimiento de Correos y nos preguntamos porqué las plantillas no hemos sido
llamadas a defender su cumplimiento.
·
Oferta
de empleo.- Dentro
del oscurantismo en el que se está produciendo la negociación actual del IV
convenio, es chocante en la coyuntura de pérdida de empleo en la que nos
encontramos, que CCOO anuncie el compromiso de la empresa para sacar adelante
una oferta de consolidación de empleo en Correos para los próximos años. Si así
fuera y no se tratase de parte de la campaña electoral, las condiciones, plazos
y demás información deberían de hacerse públicas para todo el mundo de forma
clara. No se puede jugar con la gente. La última academia de este sindicato
tuvo que cerrar por que la oferta de empleo anteriormente comprometida, no se
cumplió.
·
Libranza
de los sábados.
Una de las cuestiones que quedaron pendientes tras la firma apresurada de los
anteriores acuerdos. Esperemos que a nadie se le ocurra firmar nada que no
incluya una solución para el personal de las USEs, de ventanillas y pabellones
que les sitúe en las mismas condiciones en cuanto a libranza de sábados que al
resto del personal.
·
Excedencias
incentivadas. En
los anteriores acuerdos generales, se plasmaba un programa de excedencias
incentivadas cuyos criterios y procedimientos se negociarían en la Comisión de
Empleo Central (empresa y sindicatos firmantes). No sabemos que ha podido pasar
con esa negociación. La realidad es que las excedencias se están ofreciendo a
dedo, sin convocatorias públicas en las que pueda participar todo el mundo.
B) Expectativas de la
Negociación actual.
Recuperación del poder adquisitivo
perdido y derechos, despenalización del absentismo, blindaje frente a las
reformas de Rajoy de los nuevos acuerdos (Ultractividad, despidos por
absentismo y descuelgue patronal),concurso de traslados, mejora de los permisos
retribuidos…
Si
queremos obligar tanto a Correos y a la SEPI, como a los sindicatos que llevan
años avalando con su firma el camino a la privatización de esta empresa
pública, habrá que mojarse. Desde Esk animamos a continuar con las
movilizaciones, donde ya se están realizando los bocadillos reivindicativos
(concentraciones frente a tu oficina con pancartas a la hora del bocata) y
animamos a que se sumen a esta forma de movilización o a otras sugeridas al
resto de oficinas, carterías, CTPs y CTAs.
http://esk-gutunzorrotzak.blogspot.com.es/2015/09/las-claves-del-descontento-en-correos.html